Ante las crisis de las economías de la eurozona y la constante apreciación de los metales, la principal manera en que los inversionistas europeos han decidido transformar su dinero es comprando oro.
Un modo de invertir en oro es mediante los fondos cotizados en bolsa o ETFs, que poseen hoy gran parte de las reservas de oro del mundo, pero también el inversor particular es cada vez más demandante de oro metálico físico en la Eurozona.
En efecto, si hubiese que dar hoy un consejo acerca de en qué invertir en Europa ante los indicadores fundamentales tan poco estables de las economías regionales de hoy, sin dudas que la consigna sería invertir en lingotes de oro o en monedas.
Mucha gente de la Eurozona ya lo está haciendo, y realmente sectores pudientes se están movilizando por adueñarse de algunos lingotes o por invertir en monedas de oro, ya sea como una mera inversión o como lo que en finanzas se denomina "activo refugio", en espera de tiempos económicamente mejores.
Hoy en día crece la demanda en Europa, Estados Unidos y Asia de lingotes de oro puro de un kilogramo en una carrera que comenzara con la quiebra en septiembre de 2008 de Lehman Brothers y que parece no detenerse mientras las economías nacionales europeas no se estabilicen.
Mientras tanto, cada vez más inversores particulares europeos se muestran muy seguros en saber en qué invertir, llevando su dinero en una carrera que parece no detenerse para comprar lingotes y monedas de oro.