Buena inversión fue comprar Los Jugadores de Cartas para quien luego lo vendió en casi 120 millones de dólares
Como es sabido, los objetos suntuarios como las obras de arte pueden llegar a adquirir un gran valor en el mercado, como lo acreditan recientes ventas el el mercado pictórico como la de Los jugadores de cartas (foto superior), de Paul Cézanne en 250 millones de dólares o el valioso y conocido cuadro El Grito de Edvard Munch, un pastel vendido en mayo de 2012 por 119,9 millones de dólares, todas las cuales -para lo que nos interesa a nosotros que buscamos oportunidades de negocio y alternativas rentables de inversión- han reportado fortuna a los vendedores.
Mucho equivócanse quienes interpretan como poco interesante el coleccionismo de inversión en obras de arte, pues así como cualquier otro objeto de inversión mercantilizable puede apreciarse con el tiempo (las acciones, una pyme), las obras de arte forman un mercado de élite en el que se mueven millones de dólares y las diferencias entre una venta -casi siempre son transacciones realizadas por compradores y vendedores anónimos con la mediación de una compañía de subastas que garantiza la operación y el anonimato- y otra siempre son de varios millones si la cotización es millonaria en dólares o en el peor de los casos en unos cientos de miles de los verdes.
El vendedor del cuadro Desnudo, hojas verdes y busto, de Pablo Picasso embolsó muy bien el beneficio de su inversión: 106,5 millones de dólares cobrados a un millonario anónimo comprador en mayo de 2010 con la intermediación de la casa de subastas millonarias Christie's de Nueva York
Naturalmente, pero como ocurre también en otros mercados financieros como el bursátil o el de la compra y venta de materias primas, antes de ingresar hay que conocer más o menos bien cómo funciona para saber bien qué cuadros u obras comprar y cuándo vender, pero ello tiene como recompensa la posibilidad de invertir -por ejemplo en obras muy valiosas que se están apreciando- con un riesgo de inversión realmente bajo, en virtud del valor universalmente reconocido de un conjunto de selectos artistas considerados los mejores de la historia de la humanidad.
Las subastas son hoy la manera preferida por vendedores y compradores de arte para realizar transacciones millonarias con seguridad
Bajo esta modalidad de inversión en obras plásticas contemporáneas (el expresionismo abstracto norteamericano, por ejemplo, es uno de los estilos artísticos que más se ha valorizado en la actualidad) es posible comenzar por invertir hoy en un mercado nacional con artistas de valor local, e incluso realizar inversiones prospectivas a futuros en talentosos nuevos artistas, no siendo pocas las personas que obtienen buenos dineros con esta actividad de compra-venta tan peculiar, menos estresante que los mercados accionarios, más estable que los mercados de divisas y más segura que la inversión en pisos o que montar un negocio.